La búsqueda a contra-reloj de un raro y preciado objeto es la base de todas las historias de aventuras sin importar su ubicación en el tiempo y el espacio ni la personalidad de sus héroes. A pesar de la universalidad de las historias sobre el Vellocino de Oro, el Santo Grial, el Anillo Único o la Figurita Difícil, hay un sólo objeto que asocio inmediatamente con una aventura a punto de empezar: el Mono de Jade. De acuerdo con el señor Burns, el mono de jade debe ser hallado antes de la próxima luna llena. Nunca sabemos cómo es ni para qué sirve porque el señor Smithers le informa al señor Burns que el mono de jade había sido encontrado en su guantera. La aventura termina antes de empezar pero la búsqueda del mono de jade es una útil metáfora para una tarea imposible.
Cuando uno se cansa de escuchar “lo quiero para ayer”, buscar su propio mono de jade es una buena manera de escapar a la rutina. No tiene por qué ser un King Kong de jade, después de todo se trata de la imaginación de cada uno y además, estrictamente, los gorilas no son monos sino simios. Buscar pequeños monitos de jade de vez en cuando, los encontremos o no, oxigena el cerebro. Hace menos de un mes empecé a buscar un mono de jade y debo confesar que finalmente siento que estoy haciendo algo útil. Cuando lo encuentre, se los muestro.
5 comentarios:
Son esos logros (diarios, o a mayor escala) los que nos mantienen funcionando. Las GRANDES metas o tardan mucho o nunca se cumplen. Tal vez el secreto para no odiar -del todo- a la humanidad sea ese: encontrar pequeños monitos de piedra todos los dias, y algun que otro mono de jade anual, para tener fuerza y ganas (sobretodo ganas!) de llegar a ese king kong enorme y de diamante que tal vez nunca llegue, pero por el que vale la pena pelear.
La pucha, nos pusimos metafisicos!
A pesar de la metafísica y de la profundidad de tu comentario no puedo dejar de pensar en un king kong de diamante cayendo desde el Empire State y haciéndose pedazos contra el piso.
La Pucha que me puse materialista!
Listo no busquen más. Chihime me trajo uno.
Una buena manera de oxigenar el cerebro es la siguiente:
1) respirar profundamente con la boca cerrada, abriendo bien los orificion nasales,
2) exapar hasta que se te salga todo ese oxigeno
2 bis) repetir la operacion unas 10 veces seguidas =D
Muy buen post =)
Pd: Los Bee Gees no pueden hablar normaaaaaaaaal!! Nadie lo creeeriiaaaa!!
No sabíamos qué nombre ponerle a nuestra banda. Por esas casualidades, ensayando, nos pusimos a citar situaciones de Los Simpsons, y mencionamos la del mono de jade, y pensamos que sería un buen nombre. El tecladista googleó, y encontró tu texto que, ademas de estar bárbaro, en muchísimos aspectos nos identifica en la forma de ser y sentir la música.
Parece una boludez, pero no...
Así que gracias, de alguna forma.
Y sí, copiaré el contenido -porque de hecho lo transcribí en un papel verde para pegarlo en la sala de ensayo- pero pondré crédito a la autora.
Saludos!
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